Isabel Alejandra Torres Natarén es una mujer que ha sufrido doble violencia, la física y la institucional. Fue víctima de intento de feminicidio por parte de su esposo Iván “N” y el pasado 11 de febrero acudió a la Fiscalía General del Estado (FGE)a levantar una denuncia, a pesar del miedo, llegó ante las autoridades.

Al llegar a la fiscalía de Chiapas, su situación fue minimizada y no fue tratado el caso como intento de feminicidio, sí como lesiones y tampoco le otorgaron medidas de protección.

“Si estoy viva es porque no lo haya querido hacer sino porque tuve que salir huyendo de mi domicilio, el 11 de febrero del 2023. Desde esa fecha acudí a la fiscalía con mi familia, para realizar mi denuncia, lo que espera era apoyo, porque es difícil que una víctima llegue y denuncie, es complicado por miedo que hasta hoy tengo”.

Relató que al estar en la fiscalía, casualmente la máquina se apagó y no pidieron levantar su denuncia de manera inmediata, aunque iba con lesiones físicas.

“Desde el primer momento me dicen si sé lo que va a pasar si denuncio, que eta persona se va a ir a la cárcel y sé que es como una estrategia para que las víctimas no denunciemos y nos sintamos culpables de lo que le vaya a pasar al agresor”.

Ha pasado por el menos tres ministerios públicos, porque mientras unos se van de vacaciones para dar continuidad con su caso, tienen que empaparse nuevamente del tema, señaló.

Dijo que es tortuoso reiterar a cada rato con detalles la violencia que ha pasado y volver a repetirlo ante las autoridades.

No ha dejado de trabajar pues tienen a un niño de 5 años con problemas epilépticos y debe continuar en el trabajo en el cual también labora su agresor.

Isabel Alejandra pidió que si situación sea respetando la Ley General de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para proteger su integridad.